Desde que Genera PR asumió el control del componente de generación de la red eléctrica propiedad de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) hace 19 días, los apagones producidos por los relevos de carga programados por LUMA Energy debido a la insuficiencia de generación han sido frecuentes. Aunque la responsabilidad de programar estos apagones recae en el operador de transmisión y distribución, la falta de generación por parte de Genera PR, AES y Ecoelectrica ha sido la principal causa.
LUMA Energy, encargada de equilibrar las cargas, depende de la generación disponible de Genera PR, AES, Ecoelectrica y otras fuentes renovables para cubrir la demanda. El problema suele surgir durante las horas pico de consumo, entre las 7:00 p.m. y las 10:00 p.m., cuando se han producido los relevos de carga debido a la falta de generación en ese momento.
Por ley, LUMA Energy tiene limitaciones para administrar la producción de energía y se basa en la generación disponible por parte de los productores privados y las fuentes renovables. Mientras tanto, Genera PR ha indicado que sus unidades están en funcionamiento y han estado supliendo la demanda, pero la estabilización de la generación también depende de la central de AES, que actualmente está fuera de servicio.
Ante las preguntas sobre el uso de unidades pico para cumplir con los ahorros de combustible establecidos en el acuerdo contractual de la alianza público-privada entre Genera PR y el Gobierno de Puerto Rico, se descartó esa posibilidad. Sin embargo, se reconoce la necesidad de obtener más megavatios para satisfacer la demanda, especialmente los 700 megavatios adicionales solicitados al gobierno federal.
En las vistas de la Comisión de Energía de la Cámara de Representantes, se reveló que de las 28 unidades base en las cuatro centrales generadoras más importantes de Puerto Rico, 15 están fuera de servicio. Las unidades 7, 8 y 10 de la central de San Juan están fuera por diferentes razones, mientras que la central de Palo Seco enfrenta problemas graves con tres unidades fuera de servicio y la cuarta con producción limitada.
A pesar de que las centrales anteriormente generaban un total de 3,500 megavatios, al cierre de esta nota la generación total apenas alcanzaba los 2,538 megavatios. La situación evidencia la necesidad de mejorar la infraestructura de generación de energía en Puerto Rico para evitar futuros apagones y garantizar un suministro confiable.