La delegada congresional Elizabeth Torres presentó una querella ética contra la representante Deborah Soto luego de un incidente ocurrido en una audiencia pública de la Comisión de Arte y Cultura, presidida por Soto.
Torres asistió a la audiencia como público, pero no fue reconocida por Soto, quien presuntamente la habría tratado de manera despectiva al llamarla "mija". El altercado ocurrió durante un receso mientras se discutía el proyecto de ley 1750, que busca implementar un nuevo modelo educativo para reducir las brechas económicas y sociales.
Torres afirmó que al finalizar la audiencia le hizo una observación a Soto, quien reaccionó de manera negativa, utilizando el término "mija" y otras palabras. Por esta razón, decidió presentar formalmente la querella ética.
En su página de Facebook, Torres mencionó que le recordó a Soto que los funcionarios electos deben ser reconocidos al entrar a una audiencia pública, como muestra de respeto a la democracia y a los ciudadanos que representan.
Por su parte, Soto argumentó que durante el receso Torres se dirigió a ella de manera amenazante, criticando que no reconociera a las personas electas por el pueblo. Soto afirmó que le respondió que desconocía quién era Torres, ya que no estaba familiarizada con su apariencia y no pretendía faltarle el respeto.
La querella ética busca examinar el comportamiento de Soto durante el incidente y determinar si hubo una violación al Código de Ética o a las reglas de ética de la Cámara. Ambas legisladoras expresaron su versión de los hechos y defendieron sus acciones durante el altercado.